¿iluviajero, quieres hacer un viaje en el tiempo? El turismo intertemporal puede que tarde unos años en estar disponible. Sin embargo, hay alternativas, y un paseo por La Ciudad Vieja de Berna, es una de ellas. Estoy seguro de que Berna, la capital de Suiza no te va a defraudar.
Sumado a una arquitectura de libro de cuento, tienes que probar el chocolate, y es que en la casa materna de Toblerone, chocolate es el tercer idioma oficial.
Berna en cada una de sus calles es un lugar mágico, la historia se respira como vas a poder ver, yo la respiré cuando fui y es que hay muchos rincones de interés en Berna, que no te puedes perder.
Esta ruta es para un día, pero puedes manejarla a tu antojo, si quieres ir más días te doy todas las herramientas para que visites la ciudad en más días.
Así que no pierdas más el tiempo, si quieres visitar Berna y aún no tienes tu alojamiento en la ciudad, realiza tu reserva en el Bern Backpackers Hotel Glocke, y comienza este viaje que te llevará directo a la época medieval.
¿Te vienes a conocer los lugares de interés que ver en Berna?
Altstadt, que en alemán quiere decir “ciudad vieja”, es el casco central de la ciudad medieval de Berna.
En 1983, la Ciudad Vieja de Berna, fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO ¿La razón? Que, de “vieja”, lo tiene todo, ya que su construcción data del siglo XII, y se ha mantenido prácticamente intacta.
Su transformación más grande, la sufrió tras un fuerte incendio, que ocurrió a inicios del siglo XV. Desde ese entonces no ha sufrido mayores modificaciones.
Puedes admirar la arquitectura de los diferentes edificios que se encuentran aquí, y es que entre iglesias, puentes, una colección de fuentes renacentistas, hay mucho que fotografiar, te voy a llevar a todos lados.
Ubicada en la calle Kramgasse 49, se encuentra la antigua residencia, del hombre que, con su trabajo, le dio un impulso monumental al conocimiento científico de la humanidad, sí, te hablo de la casa de Albert Einstein.
El Einsteinhaus, es un museo creado en la casa que habitó el genio, durante su corta estancia en la ciudad de Berna, aquí podrás apreciar las condiciones de vida de él y su familia durante “los años maravillosos”.
Excelente lugar para visitar si eres amante de la historia o las ciencias, capaz y se te pega un poco de la magia que hubo en el recinto, mientras fue habitado por el genio más grande de nuestro tiempo.
Berner Münster, que en alemán (recuerda que Suiza tiene 4 idiomas oficiales) quiere decir Catedral de Berna, este edificio con arquitectura gótica, es una catedral protestante, ubicada en la Ciudad Vieja de Berna.
Tanto su campanario, como la campana en su interior, son los más grandes de Suiza (más de cien metros para la torre, y más de 10 toneladas para la campana).
En la portada principal, se encuentran más de 200 estatuas de estilo gótico, las 47 más grandes son réplicas, las originales se resguardaron Museo de Historia de Berna, pero las otras 170 estatuas, de menor tamaño, son todas originales.
Aunque el interior está bastante vacío, y la mayor parte del arte se perdió tras la iconoclasia de la Reforma protestante, sigue estando presente las vidrieras de la Catedral de Berna.
Estas vidrieras, con su representación de “la danza de la muerte” son una obra de arte espectacular, que datan de mediados del siglo XV, además de ser las más valiosas de todo el país.
La esquina inferior de la Ciudad Vieja de Berna, Nydeggkirche, en alemán, alberga una pequeña iglesia, que data de inicios del siglo XII, fue construida sobre una antigua fortaleza, y ha sufrido dramáticos cambios en cuanto a su uso a través de los siglos.
Actualmente, Nydeggkirche, es parte de las Iglesias Reformadas del Cantón de Berna-Jura-Solothurn. En sus alrededores podrás encontrar una serie de casas medievales espectaculares, tal cual una ilustración de cualquier libro de cuentos.
Continuando el camino, llegarás al puente de Nydegg Brücke, desde aquí se puede observar la fosa con osos, en la cual, puedes encontrar y fotografiar a los osos en un entorno natural, ya que este puente posee comunicación con una zona ribereña (Bear Pit).
Esta conocida atracción turística, abre sus puertas en 1857, para honrar a los osos, que son el símbolo de la ciudad (los puedes encontrar en las banderas, escudos, cajas de dulces, muros de los edificios, etc).
En años más recientes, el Bear Pit, sufrió modificaciones que le brindan a los osos una mejor estadía, más parecido a las exhibiciones actuales de cualquier zoológico.
Desde aquí podrás tomar unas fotos de película, ya que puedes estar a escasos metros de los osos.
El Jardín de las Rosas, o Rosengarten en alemán, fue un antiguo cementerio, que la ciudad reformó para convertirlo en un mirador.
Con una gran variedad de rosas, y familiares de estas, el lugar es perfecto para pasar una hermosa tarde, o disfrutar sobre el césped de un cálido día suizo.
Prepara el mejor objetivo de tu cámara, es que desde el mirador, se puede apreciar toda la Ciudad Vieja de Berna, destacándose la Catedral de Berna, y la cúpula verde del Palacio Federal de Suiza, por encima de los demás edificios.
Berna, es la cuna del chocolate, queso, y el delicioso Ingwerer (licor de jengibre) en Suiza. Aquí nacieron marcas de chocolate mundialmente famosas como Toblerone y Lindt & Sprüngli.
Por toda la ciudad, te puedes encontrar chocolaterías, en las cuales preparan el chocolate frente a ti.
Pero Berna no es solamente dulce, el plato típico de la ciudad, es el Berner Platte, que se compone de una gran variedad de carnes, desde salchichas, lenguas, hasta fiambres, acompañadas de verduras y hortalizas.
El mercado de cebollas, Zibelemärit, se celebra en noviembre de cada año, durante estas festividades, se sirve el tradicional pastel de cebollas, Zibelechueche en alemán.
El Haselnusslebkuchen, o pastel de especias de avellanas, típico en Berna, se prepara sin agua ni harina, son muchas avellanas trituradas, en conjunto con un poco de azúcar, y claras de huevo.
Las Meitschibei, son unas galletas dulces, que también tienen como base las avellanas.
Otro postre típico del cantón, son los Meringues (merengues), los que se suelen servir con mucha nata batida.
¿Te han entrado ganas de probar estas exquisiteces? Entonces no dejes de pasar por el restaurante Klosterli Weincafe, durante tu viaje a Berna.
Además de albergar las 47 grandes estatuas individuales, de la portada principal, de la catedral de Berna, en el Museo de Historia de Berna, podrás encontrar exposiciones permanentes, repartidas entre la arqueología, historia, y la etnografía.
El Museo de Einstein, está integrado al Museo de Historia de Berna, aquí se encuentra una exposición permanente mostrando la vida y obra del Físico, ya que fue en Berna, donde residía cuando dedujo su teoría de la relatividad especial, y efecto fotoeléctrico (este último es el trabajo por el cual recibe el premio Nobel en física).
En el parque del Museo de Historia de Berna, se encuentra una figura de tamaño natural de Einstein, la cual se encuentra sentada sobre un banco, ideal para sacarse una buena selfie con el genio de la física.
Desde el Jardín de las Rosas, ya se veía la imponente cúpula verde del Palacio Federal de Suiza, es tiempo de que le des un vistazo más cercano.
Este edificio institucional, es una belleza arquitectónica, a pesar de que fue construido a finales del siglo XIX, su diseño y estilo, se acoplan muy bien con el paisaje medieval de la ciudad.
Te recomiendo que lo visites tanto de día, para apreciar la arquitectura, como de noche, para que te deleites, con el espectáculo de la iluminación que presenta la portada norte del edificio.
La Fuente del Ogro, Kindlifresser, es una fuente, ubicada en la Ciudad Vieja de Berna, y poco conocida, probablemente se deba a la inquietante escultura que alberga.
La escultura, representa a un hombre, devorando la cabeza de un bebé, mientras que en su brazo izquierdo, reserva tres bebés más, con una expresión de miedo que el escultor supo plasmar.
No sé si decirte que al escultor se la ido la pinza con esta obra, ya que no hay una referencia concreta sobre a qué hace alusión, hay quienes comentan que representa al hermano mayor del duque Berchtold, quien fundó la ciudad, que, al envidiar a su hermano, comenzó a secuestrar los niños de Berna.
Otros asumen que representa al titán griego Cronos, quien, según la leyenda, devoró a sus propios hijos para evitar que lo derrocaran del trono.
Lo cierto es que la escultura data del siglo XVI, su autor fue Hans Gieng, escultor renacentista, que posee otras fuentes de su autoría en la Ciudad Vieja de Berna.
Te llevo ahora de la consternación a lo asombroso, y es que si eres amante de las automatizaciones, no puedes dejar de visitar Zytglogge (Torre del Reloj).
La Torre del Reloj, en la Ciudad Vieja de Berna, alberga un reloj astronómico, este campanario es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Data del siglo XII, y fue erigido como la primera puerta al oeste de Berna.
Llegados a este punto, ya habrás visitado los lugares más emblemáticos, de esta ciudad medieval, sin embargo, para ti, que eres un turista que le gusta visitar cada rincón, te dejo con estos otros sitios dignos de ser recorridos en Berna.
El artista alemán, Paul Klee, es nacido en Suiza, y en la ciudad de Berna, se encuentra el Zentrum Paul Klee, en este centro se resguarda cerca del 40% del trabajo realizado por el pintor, quien trascendió en los estilos surrealista, abstracto, y el expresionismo.
El Dahlholzli, es un parque zoológico, que se funda en la ciudad de Berna a principios del siglo XX. Más de 200 especies, son resguardadas en este recinto, así que podrás sacar unas fotos espectaculares de la naturaleza, gracias a la ausencia de jaulas.
El Kunstmuseum Bern, o Museo de Bellas Artes de Berna, es una parada obligatoria, si sabes apreciar el arte, puesto que dentro de sus muros te esperan ocho siglos de pinturas, y es que se trata del museo más antiguo de toda Suiza.
Al igual que Zytglogge, Kafigturm, fue en su momento, una de las puertas de acceso a la ciudad de Berna durante la época medieval. Fue construida a mediados del siglo XIII, y demolida durante los inicios del siglo XVII, aunque su reconstrucción fue inmediata.
Da igual si te interesa la flora y la botánica, o que solo disfrutes de dar paseos, el Jardín Botánico de la Universidad de Berna, es un lugar que no te puedes perder.
Repleto de árboles exóticos, y la flora alpina, este bien cultural de importancia nacional, es un lugar espléndido donde sacarse fotos.
Como bien sabes, Berna, es la capital de Suiza, un país montañoso y con muchos lugares que ver y descubrir. Aparte goza de un patrimonio cultural muy completo.
También debes saber que en Suiza, el deporte más popular es el senderismo, por lo que tiene mucho que ofrecer en este sentido. De hecho el cantón de Berna cuenta con casi 10000kms de rutas de senderismo.
¿Te vienes a descubrir donde ir si estás más de un día por esta zona de Suiza?
Al sur, hay varios sitios que merecen la pena, algunos son conocidos y otros no tanto:
¿Has visto todo lo que te ofrece Berna? La ciudad y sus alrededores tienen un amplio abanico de sitios y lugares que son la envidia de cualquier ciudad. Todo limpio bien cuidado y sobre todo con una belleza y un patrimonio para recordar siempre.
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Aquí te dejo un mapa de Berna, con los puntos de interés marcados.
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