Hola, iluviajero, ¿cómo andas? ¿Quieres conocer la NO capital de Bolivia? Hoy te voy a dar la mano, para llevarte a pasear por las calles de la ciudad de La Paz.
¿La NO capital?
Sí, La Paz, no es la capital del país andino, su capital es Sucre, aunque en La Paz, es donde se encuentran las embajadas extranjeras, la sede del poder ejecutivo y legislativo, además de ser la ciudad más conocida, a nivel mundial, de este país.
Antes de comenzar, una recomendación:
¡Ojito con la altura!
La Paz, sobrepasa la cota de Muy Alta Altitud. Se encuentra a una altura promedio de 3600 metros sobre el nivel del mar.
A esta altura, la concentración de oxígeno, es muy baja, y te puede pasar una factura muy alta, dolor de cabeza, fatiga, etc.
Por lo tanto, evita caminar demasiado, y si está dentro de tus posibilidades, pasa un par de días en la ciudad, para que tu cuerpo pueda aclimatarse a la altura, antes de salir hacer turismo.
Te recomiendo hospedarte en el Victoria Apart Hotel, que se encuentra en pleno centro de la ciudad, y rodeado de muchos edificios de interés turístico, puedes reservar ya, en Booking.com.
Comenzarás este magnífico viaje, con historias de ultratumba, artículos de hace cinco mil años, para luego conocer la ciudad desde dentro, desde la perspectiva de los locales, en sus mercados populares, y terminarás admirando esta urbe desde las alturas.
La Calle Jaén, es una pequeña y estrecha calle, ubicada en el casco viejo de La Paz. Esta calle está rodeada de misterios, leyendas, y mucha cultura.
¿Misterios?
Sí, según cuentan los locales, se pueden ver espíritus de antiguos residentes de la Calle Jaén, intentando entablar conversaciones con los transeúntes.
¿Leyendas?
De nuevo, sí, es en esta calle donde nace la idea independentista, y posterior revolución de Bolivia, de la mano de Pedro Murillo, quien residía en la Calle Jaén.
Y…. ¿Cultura?
Los museos más importantes de La Paz, se encuentran en la Calle Jaén, Museo Costumbrista Juan de Vargas, Museo del Litoral, Museo de la Casa de Murillo, Museo de Instrumentos Musicales.
Sumado a los museos anteriores, en la Calle Jaén, también se encuentra el Museo de los Metales Preciosos Precolombinos.
En este museo de metales preciosos, podrás encontrar, objetos elaborados en oro y plata, de diferentes culturas indígenas, el más relevante, tiene más de tres mil años de antigüedad.
El Mercado Lanza, es todo un mundo, y no ando de broma eh… Tiene capacidad para albergar un millar de comerciantes… ¡Una completa pasada!
Vale decir que bonito, bonito no es, la estructura de hormigón deja mucho que desear, pero se ve compensado con el ambiente que se vive en este mercado.
Carnicerías, joyeros, floristas, artesanos, libreros, centenares de establecimientos de comida, son sólo algunos de los comerciantes que puedes encontrar en este mercado, que cuenta incluso con guardería, sumado a las áreas verdes.
Uno de los accesos al Mercado Lanza, proviene directamente de la Plaza San Francisco, usando este camino, te llevaré a dar una vuelta por la plaza.
Plaza Mayor de San Francisco, lleva este nombre, en honor a la Basílica de San Francisco, desde aquí, puedes tomar fotos excelentes de la iglesia, además, es un sitio ideal para conocer personas, por lo concurrida que es.
La Basílica de San Francisco, data del siglo XV, y lleva este nombre en honor a San Francisco de Asís. Para el siglo XVIII, fue demolida totalmente, hecho que se repetiría a finales del siglo XIX, tras una inundación.
Después de este último percance, la Basílica de San Francisco, adquirió un estilo arquitectónico barroco mestizo, tanto en el interior, como en la portada principal, que es visible desde la Plaza Mayor de San Francisco.
Para finales del siglo XX, el edificio, fue nombrado monumento nacional.
La fe cristiana, llegó a tierras bolivianas, en la época de la conquista, no obstante, en esa región ya creían en “La Pachamama” (la madre Tierra), y esta creencia se ve reflejada en la próxima parada.
El Mercado de las Brujas, aquí podrás comprar pócimas, para todo tipo de objetivos, desde obtener belleza, hasta ser millonario. Obviamente, no pueden faltar los elixires para la potencia sexual.
Sin embargo, el producto estrella, de este mercado, son los fetos de llamas disecados. En muchos hogares bolivianos, hay fetos disecados de llama, enterrados como ofrenda a la Pachamama.
El Museo de la Coca, no es un museo interactivo, es más bien informativo. Dentro, hay mucho que leer, sobre esta planta, cuyo uso en la región, data de 2000 años antes de cristo.
La importancia de la hoja de Coca, en Bolivia, es tan alta, que forma parte de su escudo Nacional.
En el Museo de la Coca, podrás aprender datos interesantes, sobre la costumbre de mascar coca, y sobre la planta en sí misma, como por ejemplo, que la harina de coca contiene más calcio que la leche.
¿Quieres probar la coca?
En el museo, podrás comprar unos dulces de coca, que merecen mucho la pena eh.
Construida con una arquitectura neoclásica, y algunos matices del barroco, a inicios del siglo XIX, la Catedral Basílica Nuestra Señora de la Paz, es un imponente monumento digno de visitar.
No te conformes con tomar fotos a sus portadas, decoradas de manera preciosa, con columnas corintias, y ornamentos de estilo greco-romano, en el interior, el altar principal, junto a otros elementos, están elaborados en mármol italiano, con altorrelieves incrustados en bronce, que también te van a encantar.
Además, el museo que se encuentra en su interior, cuenta con una colección muy importante, que contiene obras de artistas nacionales e internacionales, de diferentes épocas.
La Plaza Eliot Oro Camacho, alberga el renovado Mercado Camacho, este lugar techado, cómodo, y con baños, es perfecto para degustar la gastronomía Boliviana.
Seguramente ya tienes un poco de hambre, ¿y qué mejor lugar para saciar esta necesidad, que el recinto predilecto de los locales?
Deleita tu paladar con un delicioso Chairo (sopa preparada con chuño y carne de cordero), y después del aperitivo, no dejes de probar el Plato Paceño (choclo, papa, habas, y queso, acompañado con salsa picante llamada llajua).
Con el estómago lleno, podrás apreciar desde el mirador Killi Killi, una vista espectacular, de toda la ciudad de La Paz. Te recomiendo visitar este mirador, tanto en el día como de noche.
Debe su nombre, a un ave rapaz de la zona, y más allá del esplendor emanado por la ciudad, que se puede apreciar desde este mirador, está el contexto histórico del mismo, desde aquí los indígenas vigilaban la ciudad española, y fue aquí donde dejaron los restos descuartizados del líder Tupac Katari (quien sitió la ciudad por medio año en el siglo XIX).
Hoy es tiempo de mirar la ciudad desde lo alto, ya que empezarás el día en un emblemático mirador, subirás al sistema teleférico más alto del mundo, y te deleitarás en la zona más cosmopolita de la ciudad.
Dentro del parque urbano central, y con una vista de casi 300 grados, se encuentra el Mirador Laikakota.
Más que un mirador, es un parque de juegos, la entrada es de pago, sin embargo, vale la pena.
Desde el mirador Laikakota, se puede observar plenamente, el Estadio Olímpico Henando Siles, gracias a la cercanía que tiene con el mismo.
La próxima parada, es la Plaza Franz Tamayo, coloquialmente conocida como “Plaza del Estudiante”, es el punto de convergencia de 6 calles principales de la ciudad, por lo que es muy concurrida.
En el centro de la misma, se erige una estatua en honor a Antonio José de Sucre “El Gran Mariscal de Ayacucho”. Quién junto a Bolívar, liberó a Perú y el Alto Perú, esta última región, conforma lo que hoy es Bolivia.
Desde la Plaza del Estudiante, puedes observar la Biblioteca Municipal, el moderno edificio de espejos (que funge como el fondo comercial de pensiones), y muy cerca se encuentra la Universidad Mayor de San Andrés.
Antiguamente conocida, como la plaza del óvalo, hoy la Plaza Isabel, es una de las más antiguas de la ciudad. Su mayor atractivo, es la estatua de la Reina Isabel la Católica, la cual es obra del escultor español Jaume Otero.
La estatua, se encuentra reposada, sobre una piedra comanche, que lleva grabados los escudos de Bolivia y España, junto con otras figuras. La misma, fue una donación de los residentes españoles, a inicios del siglo XX.
Es tiempo de despejar la mente, y disfrutar de un poco de naturaleza, en una urbe que no tiene demasiados espacios naturales. Y es que en la Plaza Abaroa, ubicada en Sopocachi, podrás ver y disfrutar, verde, a dónde sea que mires.
En el centro, se encuentra el monumento a Eduardo Abaroa, quien defendió Calama de la invasión chilena (conflicto bélico en el que Bolivia perdió el acceso al Mar).
El 23 de marzo, se celebra en la Plaza Abaroa, el Día del Mar, en presencia del Presidente y otras autoridades nacionales, junto al pueblo, para conmemorar la pérdida del Litoral.
El Barrio de Sopocachi, es la zona más cosmopolita que ofrece La Paz. En este lugar existe entretenimiento para todos los gustos.
Aquí se encuentran la Academia Nacional de Bellas Artes, el Conservatorio Nacional de Música, las plazas Abaroa y España, centros culturales como museos y fundaciones.
Pero eso no es todo, también se concentran aquí, los mejores restaurantes y discotecas de la ciudad.
En Sopocachi, se encuentra una de las estaciones del teleférico, línea amarilla. El teleférico de La Paz, es en la actualidad, el más alto, más moderno, y largo del mundo.
El Teleférico Amarillo, cruza por todo el centro de la ciudad, así podrás admirar desde las alturas, todos los sitios que has venido visitando en este viaje.
Construido a mediados del siglo XIX, por el arquitecto José Núñez del Prado, empleando estilos arquitectónicos jónico, dórico, y corintio, este emblemático edificio fue la sede del poder ejecutivo hasta el 2018.
El palacio de Gobierno, es coloquialmente conocido como “Palacio Quemado”, tras un incendio que sufrió a finales del siglo XIX.
Junto a él se encuentran la catedral metropolitana, el palacio legislativo, y una espléndida plaza, desde la cual, puedes sacarte fotos espectaculares con estos tres edificios.
Es tiempo de retornar sobre tus pasos, y regresar a las cercanías del hotel, para que deleites tu paladar, con la más grande variedad de vinos bolivianos, de toda la ciudad, ya que, en el Restaurante Hay Pan, son especialistas en licores.
Disfruta de su acogedor ambiente, mientras te regocijas con una buena comida, acompañada de pan caliente, recién horneado, en este excelente restaurante.
¿Has notado mucho la altitud durante el viaje? Espero que para olvidar este importante hándicap hayas disfrutado mucho de La Paz, a nivel turístico es una ciudad que tiene mucho en su oferta.
En lo que respecta a sus alrededores, hay sitios de interés que merecen la pena ser visitados.
¿Te vienes a ver algunos?
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